El cadáver del extranjero estaba en el piso de cemento, a la vista de todos los que llegaban a la morgue de Pedernales. Esa estructura es de una planta. No tiene ventanas, solo rejas en forma de cruces.

El cuerpo estaba cubierto con cal de pies a cabeza y fue tapado por los encargados del lugar para evitar el mal olor.   

El sol pegó fuerte ayer por la mañana y en la morgue no existen cuartos de refrigeración. Junto al cuerpo, en una suerte de plancha de cemento, están los restos del otro extranjero que falleció el domingo.

La avioneta en la que ambos viajaban tenía matrícula mexicana y se estrelló contra una montaña.

Según la Policía, ellos transportaban USD 1,3 millones. El dinero se contó a puerta cerrada.

Una fuente de la Fiscalía, que pidió la reserva, reveló que los cadáveres ya fueron reclamados por sus familiares a través de la Embajada de México en Ecuador.

A las 17:00, un vehículo de Medicina Legal salió hacia Quito y el conductor dijo que recibieron la orden de retirar los cuerpos.

Previamente se les realizó la autopsia para descartar que los cuerpos tuvieran droga en su interior. Desde la capital serían repatriados a su ciudad natal: Sinaloa.

Precisamente en ese Estado mexicano nació el cartel que lleva el mismo nombre, es manejado por Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y actualmente es considerado de alta peligrosidad.

Según informes difundidos por el Departamento de Justicia de Estados Unidos esa organización criminal tiene sus redes en al menos 15 país de América y en el mapa aparece Ecuador.

Desde el 2007, la Policía ecuatoriana ha registrado cuatro casos en donde se retuvieron aviones.

En todos se establecieron nexos con el cartel de Sinaloa.

El ministro del Interior, José Serrano, aseguró que el dinero hallado posiblemente podía ser utilizado para pagar por cargamentos de droga o para lavarlo.

Los empresarios de Pedernales hablan de la segunda hipótesis. “Esa plata se iba a quedar en Pedernales.

Acá todos sabemos a donde iba. Lo que hacen es inyectar capital en empresas y luego les devuelven el dinero ya lavado.

El problema es que no podemos denunciar. Esa gente es muy peligrosa”, dijo un empresario.

La bonanza económica que ha experimentado Pedernales –agrega- ha sido clave para este tipo de actividades. “Como hay circulante de dinero, este se puede lavar fácilmente”.

Pero el avión accidentado no estaría vinculado a una operación lícita, pues volaba bajo presuntamente para no ser detectado por los radares y lo hacía sin luces.

A 1 y 2 kilómetros del sitio donde colisionó la nave se encontraron dos pistas que supuestamente dejaron de utilizarse hace cuatro años, según sus dueños.

En Pedernales existen cuatro actividades económicas principales: la producción de camarón, ganadería, pesca y el turismo.

Pese a la bonanza existente, hay marcadas contradicciones. En una misma cuadra de la ciudad se pueden ver grandes casas de lujo junto a viviendas de madera, con techos de zinc y sin ventanas.
El lunes, el ministro Serrano aseguró que el país es utilizado como sitio de paso de la droga.

Lo pobladores de Pedernales afirman que las personas vinculadas al narcotráfico tienen gran poder en la zona.

Otros relatan que las mafias utilizan playas desoladas en el perfil costanero entre Pedernales y Bahía de Caráquez, como puertos. Ahí los controles son escasos por las noches. “Se escuchan lanchas circulando constantemente”, señalan vecinos.

La Marina tiene un puesto de control en la playa principal de Pedernales. Los uniformados aseguran que los operativos son permanentes por mar y tierra. No obstante, únicamente tienen dos lanchas y cinco personas.

Un agente de la Policía aseguró que el narcotráfico también tiene bajo su mando a las principales organizaciones delictivas que operan en el cantón.

Hasta hace tres años, dos de esas bandas locales se dedicaban a delitos comunes como asalto a transeúntes y el robo de domicilios.

Pero la incursión del narcotráfico cambió su orientación.

Ahora se dedican además a la venta de droga al menudeo y la prostitución. Se disputan el territorio, según el agente.

Son los encargados de custodiar los envíos de dinero o droga y además son los responsables de los casos de sicariato. El viernes se produjo el último caso.

Un reconocido abogado fue asesinado frente a una entidad bancaria, a las 18:00.
Desconocidos que iban en una moto lo acribillaron frente a las personas que a esa hora transitaban por el lugar.

Froilán Cevallos, encargado del cementerio de Pedernales, dice que al mes llegan, en promedio, 10 fallecidos. Al menos ocho por muerte violenta (asesinato y accidentes de tránsito). “Hace un mes más o menos incluso recibimos a una persona que no estaba identificada (NN). Estuvo cinco días en la morgue y nadie la reclamó.

Tuvimos que pedir donaciones con la ayuda de la Teniente Política para comprar una caja y enterrarla”.

Cevallos señala con el dedo el sitio donde está el NN.
Es un montículo de tierra, a 10 metros de donde funciona la morgue sin ventanas.




Fuente: EL COMERCIO*